dimarts, 31 de gener del 2012

Entrevista del número 7: Enrique Meneses


Enrique Meneses va néixer el 1929, el mateix any que va esclatar la gran crisi. Ara té vuitanta-dos anys -tot i que ell prefereix donar la volta al mitjó i dir que en té vint-i-vuit- i vivim submergits en una altra crisi. Però ell no s’espanta, no li agrada perdre el temps. És, essencialment, un vitalista, un amant de la vida i l’aventura. Ha treballat a l’Orient Mitjà, a la Índia, a l’Àfrica, a Sudamèrica, als EEUU, a Bòsnia o a Cuba. Quan fa uns dies explicàbem algunes de les anècdotes que l’Enrique ens havia narrat, un amic ens va dir: “Aquesta és la vida que jo voldria viure”. Sí, segurament és la vida que tothom voldria haver viscut, però pocs posseeixen el valor, en la recerca dels somnis, d’arriscar-ho tot en contra de la banca. Així és l’Enrique, una persona que té clares les limitacions que posa el temps, “las que tu quieras tener; se puede hacer de todo a cualquier edad, sólo hay que quererlo”.

Però, a més de ser un catedràtic de la vida, Enrique Meneses és un catedràtic del periodisme. Ha estat creador i director de diverses revistes des dels anys seixanta, algunes tan conegudes com Playboy o Aventureros; ha fet televisió i de qualitat, aquesta televisió que tant hem admirat dels reporters de primera línia, signant reportatges per Informe Semanal o Robinson en África de TVE, o col•laborant amb altres televisions internacionals com la CBS; ha treballat per a revistes tan importants com Paris-Match o Life; ha fet ràdio, ha estat redactor de diari i els seus llibres i les seves fotografies són famoses arreu del món. Un currículum que ara es veu arrodonit amb el seu blog (http://www.enriquemeneses.com/) que actualitza regularment i amb la direcció d’un nou projecte de televisió per Internet, Utopia TV (http://www.utopianow.tv/).

Quan parlem amb ell, sabem que no li agrada que el tractin de vostè i tampoc li agrada que l’ensabonin amb agraïments excessius. Li agrada dialogar lliurament i ofereix els seus coneixements i experiències amablement, acompanyant-les d’anècdotes i riures que fan dissoldre el temps. De seguida ens fa sentir còmodes, de seguida tenim la impressió d’estar parlant amb un bon amic.

Enrique, ja sabem que no es fàcil, però, ja que ets tota una eminència de la professió, explica’ns en què consisteix el periodisme.

Enrique Meneses: “Es muy fácil. La labor del periodista es ir, ver, escuchar, regresar y contar, no hay más, esa es su tarea. Lo de estar sentado en una mesa de nueve a seis es otra cosa, eso ya no es periodismo. Algunos creen que trabajar de periodista es cumplir un horario como si fuesen funcionarios, pero no es nada de eso. Para explicar lo que es un periodista, muchas veces pongo el ejemplo del soldado que después de la batalla de Marathon corrió hasta Atenas para anunciar que habían ganado a los persas, ni más ni menos: una persona que ve y vive una situación y vuelve para contarla.”

Això sembla fàcil, però suposem que no ho és tant. En moltes ocasions t’has de refiar del que t’expliquen persones que, segurament, tenen certs interessos. És a dir, com t’escapes de la manipulació, de la desinformació? Com es pot protegir un periodista?

E.M.: “Yo siempre he dicho que una de las cosas elementales es contrastar la información, es decir, muchos de los que van a empaquetar lo primero que tienen que hacer es saber si lo que les acaban de traer desde el lugar en el que se ha producido el suceso es verdad. Mira, hace poco empezaron a dar la noticia de la muerte de mi amigo Manu Leguineche y, cuando me lo dijeron, yo les dije que mientras Manu no me diera la noticia de su muerte yo no me lo creía. Algunos periódicos como el ABC ya habían dado la noticia y entonces yo llamé a casa de Manu, se puso la chica que se cuida de él y le pregunté “Gabri, ¿dónde está el señor?” Y ella me dijo, “pues está en el jardín leyendo la prensa”. Y yo le dije, “pues déle usted un abrazo de mi parte”. Y nada más colgar hice un escueto twiter que decía “Urgente, urgente, Manu Leguineche leyendo el periódico en el jardín”. Luego salieron algunos periodistas diciendo que había hecho falta que saliera un tío de ochenta y dos años para cumplir la norma número uno del periodismo que es la de comprobar que es certera la información. Y yo no entiendo que cuando media España tiene el teléfono de Manu, por ejemplo los del periódico El Norte de Castilla, que es el periódico en el que Manu empezó su carrera cuando Delibes estaba de director, que a nadie se le ocurriera coger el teléfono para saber si se había muerto o no. Esto lo llevo mamado desde que nací. Yo soy hijo de padre y madre periodistas, así que estas ideas son inherentes a mi forma de ser.”

Però, i el control? Les noves tecnologies, els grans grups editorials, a la tirania de les audiències, tot això no ha canviat la professió de periodista? Els partits polítics o els interessos empresarials no determinen negativament l’activitat del periodista?

E.M.: “Desde que esta profesión empezó a existir, ha habido el deseo de controlarla, porque esta profesión es un arma que puede hacer daño, que puede ensalzar y convertir a un crápula en una persona digna de beatificación. Y la política y el dinero han sido los dos primeros elementos que han atacado a lo que es el periodismo, que para mí es un servicio público. Ésta es una profesión vocacional, no concibo que sea una profesión para enriquecerse, a pesar de que hay mucha gente que se ha enriquecido con el periodismo. Cuando intervienen los empresarios y los políticos es cuando empieza todo a cambiar. El periodismo son los ojos, los oídos y la boca de la gente, el periodismo son los ojos de los que no pueden ver, los oídos de los que no pueden escuchar y la voz de los que no la tienen. Es bastardo querer hacer dinero con un servicio público y es bastardo utilizar esa fuerza para querer dominar o alcanzar unas metas políticas.”

I tu, com has sobreviscut al poder de les empreses i dels partits polítics? Com has viscut aquesta relació del periodisme amb el poder?

E.M.: “En sesenta y tres años que he ejercido esta profesión, excepto los dos primeros, siempre he trabajado como freelance. Trabajé para Paris-Match, pero siempre decidía yo lo que quería hacer. Y cuando algo que yo quería hacer no le interesaba al medio, pues me iba a otro medio. Así es como ha funcionado el periodismo y así deben funcionar los periodistas. Lo que te quiero decir es que el periodismo tiene que recuperar su identidad, el periodismo debe estar en manos de los periodistas y dirigido y gobernado por los periodistas y con una ética periodística. Los grandes medios se interesan por las informaciones que pueden reportar dinero y después está el poder de la publicidad... No puedes trabajar en un medio y denunciar cosas que van en contra de los que te dan de comer. Yo lo que veo es que en este momento hay que repensar el periodismo, deshacerlo como negocio y volver a hacerlo como si fuese un traje que no sienta bien y en el que no cabemos todos de cualquier manera.”

Però si s’ha de repensar la professió, com ha de ser aquest periodista del futur? Com sospites que evolucionarà la professió?

E.M.: “Los periodistas deben meterse en la cabeza que su formación de licenciado no es una patente de corso, con eso no tienen nada, la verdadera universidad está en la calle, la verdadera universidad nunca ha estado en un edificio donde se ha impartido historia del periodismo o una serie de cosas que son absolutamente teóricas y anecdóticas... La universidad es para los dentistas, para los médicos, para los arquitectos, los ingenieros... para todos aquellos que pueden causar la muerte con su profesión, pero el periodismo es como la ebanistería o como la carpintería. El periodismo es aventura, es para aventureros. El periodista del futuro tiene que ser un  periodista total, tiene que conocerse una región del mundo en profundidad, su mentalidad, su historia... Yo salí en un barco desde Marsella hacia Oriente Medio, durmiendo en el puente del barco hasta que llegué a Alejandría y me tiré siete años viviendo las diferentes guerras de la zona y conociendo la cultura, las costumbres y a los personajes. Yo no concibo el periodismo de otra manera. Las futuras redacciones tendrán a pocos periodistas en plantilla, pero serán periodistas con una gran experiencia y un gran conocimiento de una zona, serán periodistas capaces de escribir libros sobre esos lugares. Yo tengo un libro que se titula “Nasser, el último faraón” que fue el trabajo de siete años de haber estado viviendo allí, de haberme entrevistado con Nasser muchas veces. Esto es lo que se valorará en el nuevo periodismo.”

Així que ara estem vivim una revolució en el periodisme, no?

E.M.: “ El periodismo actualmente está viviendo dos crisis. Una es la crisis mundial económica y ésa va a pasar. Pero, además, hay una crisis tecnológica brutal que yo considero que es un cambio de era, lo mismo que pasó con Gutemberg en su momento. Este cambio no tiene vuelta atrás. El mundo digital domina ya todo, es el fin de los intermediarios. Yo estoy vendiendo mis fotografías por internet. Tengo mi flikcr con mis fotografías y mi blog desde hace diez años, y todo periodista debe tener su blog. Yo, aunque ya soy un viejo, me leo cuatro o cinco periódicos cada día, pero hace varios años que no compro ni leo un periódico en papel. El papel, fuera. Una tonelada de papel son quince árboles abatidos. Es una canallada publicar millones y millones de hojas de papel que luego sólo sirven para envolver pescado.”

Bé, explica’ns ara algunes de les teves experiències concretes. Sabem que vas viure durant set anys a l’Orient Mitjà, vivint molt a prop les guerres entre àrabs i jueus. Però també sabem que vas estar a Cuba en el moment de la Revolució i que vas conèixer Fidel Castro i el Che Guevara. Després va venir la famosa entrevista de Herbert Matthews que va convertir Fidel en tot un mite...

E.M.: “ No, no, la entrevista de Herbert Matthews es anterior a la mía. Matthews era un periodista muy conocido que ya había estado en la Guerra Civil Española, del lado republicano... El caso es que Batista había hecho correr el rumor de que Fidel había sido abatido en una escaramuza y Fidel mandó llamar a alguien conocido para que le hicieran una entrevista. Y fueron a buscar a Herbert Matthews a Estados Unidos y prepararon un encuentro con Fidel Castro en Bayamo.”

Bé, però vas estar amb ell i vas aconseguir material molt valuós: reportatges, fotografies, una pel•lícula. Encara avui podem veure las imatges del Fidel revolucionari que tu vas gravar a Sierra Maestra. Suposem que aquella va ser una experiència molt excitant, no?

E.M.: “A ver, yo llegué a Cuba por una mujer, ésa es la única razón. Lo que pasa es que cuando llegué allí me dieron plantón y me puse a escribir para sobrevivir. Porque esta es una profesión para supervivientes y el que piense de otra manera se equivoca. Yo me encontré en La Habana escribiendo y con que todo el mundo estaba diciendo que había un centenar de hombres en la sierra haciendo la Revolución. Estuve quince días escondido en La Habana, en diciembre del cincuenta y siete, buscando un guía que me llevara hasta Sierra Maestra, que estaba rodeada por dieciséis mil soldados de Batista. Cogí mis cámaras y mis rollos de película y lo puse todo en el fondo de una caja de whisky marcada y me fui para la sierra con un guía. Cogí un vuelo, el “cañero”, que era el vuelo que llevaba a los capataces de las plantaciones de caña y que paraba en las diferentes poblaciones que hay entre La Habana y Santiago. Era el peor vuelo y ningún militar esperaba que un periodista viajase en él. Total, que llegué a Sierra Maestra y estuve con Fidel y su ejército cuatro meses de un lado para otro por las montañas porque cada día teníamos que cambiar de emplazamiento para evitar los bombardeos. Con el tiempo ya no me hacían ni caso y les conocí bien a todos.”

Suposem que no va ser gens fàcil, però vas tenir l’oportunitat de conèixer en persona a tots aquests personatges mítics... Fidel, el Che,...

E.M.: “A veces me han preguntado por el Che Guevara, pero es que el Che Guevara para mí era un “guaperas”, bajito, pero muy mal revolucionario. La prueba es que fracasó en el Congo, fracasó en Argelia, fracasó en Bolivia... Para mí el Che Guevara es el peor revolucionario que he conocido. Fidel me pareció un revolucionario con ideas propias, que después no ha cumplido con ninguna, pero con un partido que se llamaba el 26 de Julio diferente al Partido Comunista... Yo asistí a las reuniones con el Partido Comunista en la sierra y Fidel los mandó a la mierda, les dijo que no quería salir de un imperialismo para meterse en otro y que si querían apoyar la Revolución que la apoyasen, pero que sin ninguna condición... Bueno, después de eso ya hemos visto lo que ha pasado: el Partido Comunista, cuando Fidel llegó a La Habana, se cargó su iniciativa. Pero a mí todo eso me ayudó muchísimo porque ese reportaje mío... Paris Mach publicó tres semanas de reportajes con mi material; hice una película que se la vendí a la CBS por cincuenta mil dólares; ahora mismo, por ejemplo, tengo una exposición en el Museo Nacional de Bellas Artes de La Habana con mis fotografías de la Revolución.”

Tota una experiència que ens fa sentir molta enveja. Però, canviem de tema. A la teva pàgina web hem trobat el decàleg de l’aventurer. La veritat és que ens ha agradat força i ens ha cridat l’atenció. Però, sobretot, ens ha agradat una sentència: “el más débil tiene razón”. Si us plau, explica’ns què vols dir, tot i que només sigui per confirmar que hi estem d’acord.

E.M.: “El periodista siempre tiene que estar con el más débil y en contra del más fuerte. Los más débiles tienen razón porque poseen la sabiduría del pueblo, pero la sabiduría de verdad. El periodista no puede divulgar el oscurantismo y la mentira como la de esos iluminados que salen en televisión, sino la sabiduría del pueblo. Eso lo he podido comprobar en todos los viajes que he hecho, por Oriente Medio, por África o por América y los Estados Unidos.”

Hem estat parlant amb l’Enrique durant gairebé dues hores. Les seves paraules són sempre amables i interessants, però en algun moment ens hem adonat que el temps havia volat i que encara volíem saber més coses. Potser és que volíem saber massa coses. Enrique, abans d’acabar, per què no ens expliques amb detall què és Utopia TV, el teu últim projecte.

E.M.: “La televisión Utopía TV la hemos hecho sin dinero porque quiero convencer a los jóvenes de que el dinero no es todo. Lo que cuenta primero es la idea; segundo, el dinero que llevas en el bolsillo; y tercero, ya te vendrán a cortejar los que tienen el dinero cuando vean que lo que has construido es válido. Lo que sucede es que entonces tú te tienes que defender más para que no controlen los contenidos, la parte periodística. En Utopía TV, nosotros nos hemos inventado hasta nuestra propia moneda, el “pichulín”. El “pichulín” es un invento que hicieron los soldados españoles en Bosnia porque se confundían entre las monedas croatas y bosnias, y decidieron que el “pichulin” era el equivalente a una peseta. Pues nosotros lo utilizamos para pagar el tiempo de los voluntarios que participan en esta televisión que nosotros consideramos utópica, pero utopía como un pensamiento que se realiza, no como una quimera irrealizable. Mucha gente se ríe de nuestros “pichulines”, pero nosotros lo que queremos precisamente es que la gente se ría. Es una televisión diferente, libre, hecha por profesionales voluntarios que sólo les interesa hacer periodismo.”

Encara continuem xerrant una estona. De tot i de res en concret, ens deixem endur per la pròpia conversa. En algun moment ens explica el que contesta quan un estudiant en alguna conferència li pregunta si no tenia por de les bales quan era reporter de guerra.

E.M.: “Cuando me lo preguntan, yo siempre les respondo que nunca he tenido miedo del sonido de las balas, que es absurdo. Entonces les pregunto, ¿no habéis estudiado física en el bachillerato? ¿No sabéis cuál es la velocidad del sonido? Pues deberíais saber que la única bala que nos puede matar es la que no escuchamos llegar. Mientras oyes las balas es que estás vivo.”

És aquest esperit aventurer el que l’ha portat als llocs més allunyats i a viure les situacions més perilloses. Però també es preocupa del que és més proper, ens confessa que se sent de centre-esquerra i ens parla de política nacional i de Zapatero, de Mas i de Rajoy. Fins i tot ens fa un comentari del moviment 15M.

E.M.: “Yo estoy con el movimiento 15M y los Indignados, estoy de acuerdo con ellos. Aunque tengo que decirte que me preocuparon mucho las imágenes de cuando un grupo de jóvenes se pusieron a las puertas del Parlamento Catalán para impedir la entrada a los diputados. Pero no debéis confundir ese grupo de exaltados que siempre son los mismos, los que van buscando follón y el enfrentamiento con la policía, con el movimiento 15M, eso es otra cosa.”

Enrique no necessita ser hipòcrita. Diu el que pensa de manera clara, sense circumloquis i acompanyat de les anècdotes més interessants. Quan ens acomiadem d’ell ens recorda que a Madrid sempre tindrem una casa i un amic. I de ben segur que, quan hi anem, ens agradarà tornar a xerrar amb ell.p


Equip de Redacció d’...Ànsia